A mi pueblo llegó un chino que ponía agujas para dejar de fumar. Por cada vecino que dejaba el tabaco, el chino hacía 2 cigarros gigantes de madera, en uno escribía el nombre del ex fumador, en el otro el día y hora de su último cigarro, y los hincaba en el suelo uno enfrente del otro; los 2 siguientes los clavaba pegados a los anteriores, y así. Al poco se había formado un caminito de cigarros desde la puerta de su casa hasta las eras. Si el chino hubiera vivido más, el caminito habría llegado al pueblo de al lado y hasta habría dado la vuelta a la Tierra, porque su método era infalible. Lástima, ya digo, que un cáncer de pulmón se lo llevara a los 2 meses. A mí es que me encanta fumar, decía, y se reía y le salía el humo, como a un dragón viejo, entre los dientes, por la nariz y hasta por las orejas.
Lugar: Kyoto – Japón
9 replies on “Semana 7”
Parece salido de una de las historias de Murakami…
Entre lo cotidiano y lo irreal..
Me gustó.
Muchas gracias Dani!!! pedazo de fan!
Gracias, Dani! Como nos copie Murakami alguna idea de este blog, me lo murakomo! 😉
La foto es espectacular, y el texto, sabio y hondo… Enhorabuena
Gracias, Antonio. Un honor.
Gracias Sr. Herrera! Me alegro de que te guste!
Genial.
El sitio con sus colores rojos es fantástico pero vuestra interpretación es genial.
Buena foto. Ojalá tuviera yo alguna parecida.
Marta! Muchas gracias! y Kique, en color la foto gana mucho, todo hay que decirlo….