A veces, pero pocas, se me pone la piel de gallina con alguna canción. “The Wolf” de Eddie Vedder suele tener la culpa. Nunca me había pasado antes en un concierto.
Algunos dicen que Damien Jurado es una leyenda viva. Eso lo sabes por lo que ocurre cuando aparece con su guitarra. Todo el mundo se calla, como en un concierto de música clásica. Ya ahí empiezan los escalofríos.
Cada estribillo es un drama, te emocionas, te imaginas uno de sus personajes, y no paras de decirte…pero cómo puede conseguir que te sientas así de bien? como con una buena película.
La última vez que vino a Madrid estaba acompañado, y me refiero a él, porque para mí fue el último concierto al que asistí yo solo. Un amigo me dejó colgado en la puerta, pero perdérselo era pecado. Desde entonces ir a ver a Damien Jurado se ha transformado en un rito. Esta vez tuve la mejor compañía, y nos juntamos un buen grupito de no más de 100 personas. Y al menos nos hicimos una foto con Lourdes Hernández.
Ya no sé de qué soy más amigo, si del rock o del folk.
El grupo favorito de Damien Jurado es Nirvana. Y él es un hombre feliz que escribe canciones muy tristes.
If you call off the guns, I call off the dogs…escuchad esto (pincha aquí) Damien Jurado – The Killer
Esta mañana ya me enteré del resultado…todos sonreímos, que es lo que de verdad importa.